MUERTOS AL PECADO, VIVOS PARA DIOS

Hay una versión aguada, descafeinada del Evangelio, de una gracia barata, diluida y completamente falta de poder. En el pasaje en el que hoy meditamos aparece una solemne verdad que es el corazón mismo del Evangelio: Jesús mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre la cruz. El Justo, el Impecable murió, pero además también vivió por nosotros, cumpliendo así con toda justicia las demandas de la Ley divina. Pero además también nos enseña que el pecado no nos dominará más. ¿Tienes un deseo sincero de ser santo, de obedecer perfectamente al Padre en todo? El Evangelio no solo nos declara justos, sino que también pretende hacernos justos.
1 Pedro 2:24-25

GRACIA, FE Y SEGURIDAD

¿Qué ha hecho Dios para afirmar, asegurar, y garantizar la promesa de que su pueblo heredará la promesa hecha a Abraham y su descendencia? ¿Y cómo se alcanza esa promesa, es solo por fe? ¿Por qué Pablo insiste en este capítulo cuatro de Romanos en hablar de la «justicia de la fe»? ¿Entendemos bien hoy en día qué es la gracia y qué es la fe? Es más, ¿entendemos realmente la relación que existe entre fe y gracia? ¿Podemos estar seguros al 100% de que recibiremos aquello que Dios ha prometido a quienes tienen la fe de Abraham? Descubre hoy con nosotros guiados por el apóstol Pablo, inspirado por el Espíritu Santo, la respuesta a estas preguntas.
Romanos 4:13-21

DE LA MÁS DENSA OSCURIDAD HACIA LA LUZ MÁS GLORIOSA

Acompáñanos hoy en un camino que te proponemos desde la oscuridad más profunda hasta llegar a la luz más gloriosa del Evangelio. Nuestro hermano Ismael nos servirá de guía en este apasionante viaje centrado en las últimas horas de Jesús en su ministerio terrenal. En medio de la más densa oscuridad se pudo ir un grito desde la cruz. Jesús fue crucificado a las nueve de la mañana del viernes, a las doce del mediodía el cielo se oscureció como vistiéndose de luto y así permaneció hasta las tres de la tarde, hora en la que Jesús expiró. Pero la pregunta es, ¿a qué se debieron estas tinieblas? ¿Cuál fue el motivo de esa oscuridad?
Marcos 15:33-47.

LA JUSTIFICACIÓN Y SUS IMPLICACIONES

La doctrina de la justificación tiene un papel central en la historia de la Iglesia y hace que el Cristianismo bíblico sea una fe totalmente distinta a la de cualquier otra religión. Una comprensión correcta del Evangelio y de la eterna salvación que este nos ofrece, debe de abordar el significado y la importancia de esta doctrina. Porque una comprensión incorrecta de la justificación corrompe por completo el auténtico Evangelio, mina el cimiento de la vida cristiana, y hace imposible la seguridad de la salvación. Romanos 5:1-5.

ACERQUÉMONOS

Alrededor de la Mesa del Señor celebramos un hecho pasado, presente y futuro. Una obra que fue hecha completa y perfecta en el pasado, pero que está siendo aplicada a nuestras vidas hoy en el presente y que tendrá repercusiones duraderas y eternas en el futuro. Jesús es el auténtico y definitivo sacerdote que ofreció un único y suficiente sacrificio por nuestra redención. Y ahora Él está sentado en el trono como Rey Sacerdote y sigue actuando en favor de su pueblo. ¿Qué dios como nuestro Dios que hace posible lo imposible? Hebreos 10:11-25

PERO CRISTO…

Hay un antes y un después con la llegada de Jesucristo y la obra que Él realizó. Jesús cambió para siempre la Historia de la humanidad, lo mismo que ha cambiado la historia personal de salvación de cada uno de sus hijos. El hecho está consumado y ahora Jesús está sentado en el trono desde donde intercede por cada uno de los miembros de su pueblo, la Iglesia. Hebreos 10:12-25.

MUERTO Y RESUCITADO

En el pasaje que hoy meditamos, al final del capítulo 4 de la epístola a los Romanos, Pablo nos dice literalmente que Jesucristo fue «entregado por nuestras transgresiones y resucitado para nuestra justificación». ¿Qué implicaciones tienen para nuestra fe estas dos afirmaciones del apóstol de los gentiles? Romanos 4:22-25.