UNA ORACIÓN POR AVIVAMIENTO

El profeta Isaías hace, en el pasaje que hoy abordamos, una honesta, sincera y transparente confesión de pecado. Isaías reconoce que Israel está en ruinas y no es culpa de Dios. Él es bueno, salió en ayuda de los que le tenían en cuenta. Si hoy el pueblo sufre, no es por culpa de Dios, porque Él bendice a los que le buscan, Él bendice a los que andan delante de Él. Dios quiere bendecir, hacer proezas. Si Jerusalén está en ruinas es porque el pueblo no se ha acordado de Dios, porque no se han alegrado en sus misericordias. Si hoy estamos con un corazón reseco no es culpa de Dios sino nuestra. Por eso la actitud correcta delante de Dios es reconocer clara, abierta y sinceramente nuestra falta de celo, nuestra frialdad y apatía. Si así lo hacemos pronto comprobaremos que Dios atiende al humilde. Isaías 64:4-7.

LA CONTIENDA POR LA FE 2

Judas nos llama en esta carta a ser amorosamente intolerantes con todo aquello que atente contra la verdad del Evangelio. Hoy entraremos a considerar dos exhortaciones que se nos hace en esta carta en nuestra lucha por la fe. Por un lado a recordar las advertencias que ya hemos recibido de que habría falsos maestros que saldrían de nosotros mismos. Y por otro lado a custodiar la verdadera fe en nuestra propia alma edificándola y orando en el Espíritu Santo. Judas 1:3-4, 17-23.

¿HASTA CUÁNDO?

¿Le has preguntado alguna vez al Señor «hasta cuándo»? Esta pregunta puede salir de un corazón resentido y amargado, pero también lo puede hacer de uno que está confiando en Dios pero que desfallece por momentos. Esta fue la experiencia del rey David en el salmo que hoy analizamos. Y también fue la experiencia de muchos otros hombres de Dios  que vivieron momentos de tristeza, dolor y zozobra. Curiosamente un tercio de los salmos son lamentos y sin embargo en ellos millones de creyentes a lo largo de miles de años han encontrado alivio y nuevas fuerzas. Hoy descubriremos con David como pasar del llanto al canto. Salmo 13:1-6.

REEDIFICAD LA CASA

En un tiempo en el que el pueblo de Dios estaba muy atareado con sus labores, como lo estamos también nosotros hoy en día, Dios les envía un mensaje urgente por medio del profeta Hageo. A pesar de todo su trabajo y esfuerzo, el pueblo vive en la indigencia y Dios los llama a considerar sus caminos. Además les revela que es Él mismo quien les ha traído la ruina y la necesidad en la que están mal viviendo. ¿Se ha convertido Dios de pronto en el mayor enemigo de su propio pueblo? Ni mucho menos, pero a veces el Señor tiene que quitarnos hasta lo más necesario para que reaccionemos y nos demos cuenta de nuestro propio desvarío. ¿Qué implica olvidarse de la casa del Señor? Hageo 1.

LA SAGRADA ACTIVIDAD DEL DESCANSO

Necesitamos saber disfrutar del descanso, de las vacaciones que el Señor nos da, para que sean un verdadero reposo y seamos así renovados. Solemos conectar el significado de nuestras vidas con nuestra productividad, con nuestro desempeño. Así siempre estamos tratando de hacer cosas, de trabajar a fin justificar nuestra existencia, intentando convencernos a nosotros mismos, a Dios y a los demás de que nuestra vida vale, que tiene significado. Cuando el corazón está así descansar produce ansiedad, genera un sentido de culpa. Sin embargo, Jesús le propone a los discípulos descansar en un momento en el cual precisamente hay mucho trabajo por hacer. De esta manera el Señor está honrando la naturaleza humana. Dios nos creó y diseñó de manera idónea para alcanzar el fin para el que nos creó. Esto implica una ética del trabajo, una manera de vivir, una forma de descansar, una manera correcta de conducirse para alcanzar ese fin.
Marcos 6:30-31

LAS PARÁBOLAS Y EL MISTERIO DEL REINO 6 | Fe en la tierra

En esta ocasión el énfasis de la parábola que analizamos es la necesidad de una fe militante, combativa, que se manifiesta en una oración constante y tenaz, que persevera hasta que la Estrella resplandeciente de la mañana sale. En esta parábola vamos a ver cuatro similitudes y cuatro contrastes entre la viuda y la Iglesia a la que representa. Lucas 18:1-3.

LAS PARÁBOLAS Y EL MISTERIO DEL REINO 5 | Imprudencia fatal

Jesús destaca en esta parábola uno de los rasgos distintivos del Reino de los cielos: la vigilancia espiritual. Desde que nuestros padres, Adán y Eva, pecaron vivimos en la noche oscura, y el creyente es un centinela que espera al alba. “Velad, pues, porque no sabéis el día ni la hora en que el Hijo del Hombre ha de venir.” En este versículo hay dos verdades fundamentales y un mandamiento que debemos cumplir. Descubre hoy con nosotros cuáles son y cómo debemos aplicarlas en nuestro diario caminar. Mateo 25:1-13

BRILLANDO EN LA NOCHE DEL MUNDO 12 | UNA ORACIÓN EFICAZ 3

En este tercer mensaje dedicado a la oración de Daniel en favor de su pueblo vamos a considerar las dos últimas características que debe tener una oración eficaz desde el punto de vista bíblico. En los dos mensajes anteriores ya vimos que debe ser una oración cordial (que sale del corazón), respetuosa, apropiada a la ocasión, hecha en un espíritu contrito y de forma verdaderamente creyente. Hoy además entraremos a considerar que debe ser una oración piadosa y finalmente que debemos buscar con ella una auténtica justicia. Así, piadosa y justa son las dos últimas características que encontramos en la oración de Daniel que fue escuchada por Dios desde el mismo momento en que comenzó a hacerla. Daniel 9:15-21

BRILLANDO EN LA NOCHE DEL MUNDO 11 | UNA ORACIÓN EFICAZ 2

En el mensaje anterior ya vimos tres características que acompañan a una oración eficaz. Vimos que la oración eficaz se presenta ante Dios de manera «cordial», es decir, desde el corazón. Es una oración que se levanta en integridad de manera respetuosa y perfectamente alineada con los deseos de Dios. También aprendimos que es una oración apropiada al momento actual, lo que toca orar en ese momento. Hay una oración más habitual, pero hay momentos que demandan un tipo de oración especial. Hoy además profundizaremos en otros aspectos que deben acompañar a una oración eficaz. El orante debe presentar una actitud de corazón contrito y humillado delante de Dios. Por otro lado el creyente debe presentarse con certidumbre de fe. No es una oración que se hace a ver lo que pasa, no. Es una oación en la que quien se presenta ante Dios viene en plena confianza en las misericordias del Señor. Daniel 9:1-21.

BRILLANDO EN LA NOCHE DEL MUNDO 10 | UNA ORACIÓN EFICAZ 1

Daniel comienza este capítulo expresando una sentida oración a Dios solidarizándose con el pecado del pueblo. Lo hace trayendo a la memoria la Palabra de Dios que había sido proclamada por el profeta Jeremías. Vemos así a Daniel escudriñando, bebiendo, asimilando y haciendo suya la Palabra recibida y recordando las promesas y los mandatos del Señor. Daniel intercede por el pueblo que está siendo disciplinado en Babilonia en cumplimiento de esa profecía, porque Dios es fiel y cumple lo que promete. Analizaremos esta entrañable oración que llega hasta el mismo rostro del Señor. Así descubriremos las características que tiene una oración eficaz. Daniel 9:1-23.