RECUPERANDO LO PERDIDO

Cuando apartamos nuestra mirada del Señor y comenzamos a intentar dirigir nuestras vidas con la «sabiduría del mundo», es muy habitual que acudamos a refugios que no nos pueden proteger. Esto fue lo que vivió David en el pasaje que hoy examinamos. El rey Saúl lo buscaba para matarlo y él dejó que un temor anidara en su corazón. David llevaba años huyendo de Saúl y pensó que más tarde o más temprano el rey acabaría matándolo. Así decidió exiliarse y se fue a vivir con los filisteos, los enemigos del pueblo de Dios. La experiencia que él y sus seiscientos hombres vivieron fue una de las más amargas de su vida. Nosotros también, caemos a menudo en este error que nos conduce a indecibles sufrimientos y angustias. ¿Habrá alguna manera de recuperar lo que hemos perdido? 1 Samuel 30:1-31.

EL COSTO DE SEGUIR A CRISTO

Tres son las respuestas que Jesús da en este pasaje a aquellos que quieren seguirle. Si las leemos fuera de su contexto nos pueden parecer muy radicales y hasta extremas, pero Jesús tiene una buena razón para responder así. Él no ponía las cosas fáciles a quienes mostraban interés en ser sus discípulos, más bien todo lo contrario. La pregunta fundamental que debemos plantearnos seriamente es la siguiente. ¿Por qué buscamos a Jesús? ¿Cuáles son las auténticas y reales motivaciones para desear ser un discípulo suyo? ¿Nos hemos detenido a considerar seriamente cuál es el costo de seguirle? Lucas 9:57-62.

EL SEÑOR PRESIDE EN LA TORMENTA

Este conocido pasaje en el cual los discípulos viven una experiencia traumática encierra varias verdades aplicables a nuestras circunstancias actuales. Todos, más tarde o más temprano, vamos a pasar por tormentas, tal vez no físicas, pero sí del alma. Todos experimentaremos momentos de dolor, pérdida, enfermedad, sufrimiento y problemas que viviremos como auténticas tempestades. El mismo Jesús nos lo advierte en varias ocasiones. Por eso debemos estar muy atentos a estas verdades que nos ayudarán a superar esos terribles momentos mientras el Señor nos conduce a través del valle de la prueba.
Mateo 14:22-33

LA ESPERANZA DE NUESTRA HERENCIA

29En medio de la adversidad, las pruebas y la enfermedad es fácil que bajemos la mirada de nuestro Señor a las circunstancias, a lo que nos rodea y así perdamos la perspectiva divina y desesperemos. Pedro escribe su primera carta a una iglesia que está siendo perseguida a causa de su fe. Han tenido que salir de su país, de su tierra (son expatriados) y están dispersos por diferentes lugares. Pueden ser extraños en este mundo, pueden ser rechazados, perseguidos y expatriados, pero hay un lugar al que pertenecen, y hay un mundo en el que encajan. Además hay una herencia que recibirán y en ella estará todo lo que Dios les ha prometido y provisto en Cristo. ¿Cuál es esa herencia? ¿Cuál fue el motivo por el cual Dios los salvó? ¿Por qué les dio esa herencia?
1 Pedro 1:3-5

TODAS LAS COSAS NOS AYUDAN PARA BIEN

El texto que hoy analizamos es muy conocido y muy utilizado en todo el mundo evangélico. Pero, ¿conocemos y vivimos todo lo que el mismo significa? En él se encuentra insertada una de las mayores promesas de la Palabra de Dios para su pueblo. Una que puede librarnos y revolucionar nuestra vida para los días que están en el porvenir. Hay una verdad muy clara en las Escrituras y es esta: nadie puede frustrar los planes del Señor: “Todo lo que Jehová quiere, lo hace, en los cielos y en la tierra, en los mares y en todos los abismos.” (Sal. 135:6). Dios está usando su poder y su sabiduría para que todo lo que sucede obre para el bien de su pueblo escogido.
Romanos 8:28.

LA JUSTIFICACIÓN Y SUS IMPLICACIONES

La doctrina de la justificación tiene un papel central en la historia de la Iglesia y hace que el Cristianismo bíblico sea una fe totalmente distinta a la de cualquier otra religión. Una comprensión correcta del Evangelio y de la eterna salvación que este nos ofrece, debe de abordar el significado y la importancia de esta doctrina. Porque una comprensión incorrecta de la justificación corrompe por completo el auténtico Evangelio, mina el cimiento de la vida cristiana, y hace imposible la seguridad de la salvación. Romanos 5:1-5.

JESÚS ESTÁ EN TU BARCA

Todos, más tarde o más temprano experimentamos tormentas en la vida. Son situaciones que no podemos controlar y que desafían nuestra fe, nos causan dudas y provocan dolor y sufrimiento. Durante esas circunstancias difíciles solemos ser presa del temor por lo que nos depara el futuro más o menos inmediato y además tendemos a dudar del poder o del amor o de la sabiduría de Dios para superarlas. De la experiencia que vivieron los discípulos con Jesús en este pasaje de Marcos aprendemos cuál es la solución que el Señor nos ofrece en estas situaciones tan duras. Marcos 4:35-41.

BRILLANDO EN LA NOCHE DEL MUNDO 9 | BARBARIE Y GLORIA

En esta nueva visión de Daniel vuelven a aparecer extrañas imágenes que despiertan nuestra imaginación. Tiene varios puntos de contacto con otras visiones y sueños que se nos relatan en este libro, pero el tiempo al que hace referencia esta visión es muy concreto. Se trata de una profecía para el tiempo en el que termine la ira de Dios sobre su pueblo rebelde. Para el momento en que finalice la cautividad babilónica y los siglos siguientes hasta la llegada de la cuarta bestia. Una vez más contemplamos con asombro cómo Dios reina sobre la tierra y usa a reyes, pueblos y culturas para llevar a cabo su plan. Daniel 8:1-27.

BRILLANDO EN LA NOCHE DEL MUNDO 7 | UN ESPÍRITU SUPERIOR

El Imperio Medo-Persa ha conquistado Babilonia y el anciano Daniel enfrenta sus últimos días. El Enemigo instiga y guía a los envidiosos que anhelan la posición privilegiada de Daniel en la corte real. Traman un plan para destruir a Daniel, pero Dios interviene de manera prodigiosa en su vida librándolo de ellos. Finalmente, el propio rey Ciro reconoce la grandeza y la superioridad del Dios de Daniel sobre los demás dioses paganos. En un mundo dominado por los mediocres, los avariciosos y los pigmeos morales, Daniel resplandece con una luz y una serenidad que demuestran que ha estado en la presencia del Dios único y verdadero. Nosotros también somos llamados y retados a salir de la mediocridad y de la corrupción moral que inunda esta Babilonia en la que ahora vivimos. Daniel 6:1-28.

ACEITE INAGOTABLE

Las decisiones que tomamos en la vida tienen siempre unas consecuencias y el hecho de ser hijos de Dios no nos libra de las mismas. Un profeta del tiempo de Eliseo fallece dejando a su familia en una lamentable situación económica. La viuda acude a Eliseo, no buscando justicia porque la ley estaba en su contra, sino buscando misericordia y una solución para su difícil situación. Dios la sorprende y nos sorprende también a nosotros con una solución totalmente inesperada de la que podemos aprender valiosas enseñanzas para nuestro caminar de fe. 2 Reyes 4:1-7.