HICE PACTO CON MIS OJOS

Tras las acusaciones que le hacen sus amigos de falta de integridad y de haber pecado en oculto, Job defiende su inocencia en este capítulo 31. Para quienes nos conocemos bastante bien por el paso de los años, es muy evidente que la lujuria y la inmoralidad sexual comienzan por la vista. Por eso el mundo de la publicidad se esfuerza constantemente en mostrarnos cuerpos jóvenes y atractivos para vendernos sus productos. La sensualidad de nuestra carne nos conduce a la desobediencia, y esta a alejarnos de nuestro Hacedor. Este pasaje de la Escritura contiene valiosísimos consejos para vivir con limpia conciencia delante de Dios. Job 31:1-4.

JESÚS ES IMPARABLE

Hoy veremos tres hechos que vivieron los discípulos con Jesús. En cada uno de ellos podremos descubrir el arrollador poder del Señor que transformó la vida de los discípulos y que puede transformar también las nuestras si tenemos oídos atentos. Abramos nuestros corazones a la Palabra y dejemos que ésta nos inunde con su luz y con su poder. Jesús es imparable y le damos muchas gracias a Dios porque ningún obstáculo impedirá que su perfecta obra llegue a término. Lucas 8:22-37.

SIETE FRASES DE JESÚS EN LA CRUZ

Dicen que las últimas palabras de un moribundo son siempre trascendentales, y las del Hijo de Dios, por supuesto que lo fueron y por eso quedaron registradas en las Sagradas Escrituras. La manera como murió Jesús nos enseña cómo hemos de vivir la vida cristiana. Cada una de estas frases contiene una importante enseñanza para cada hijo de Dios, que nos muestran cómo pasar del reino del «yo» al Reino de Dios. Lucas 23 y Juan 19.

RECUPERANDO LO PERDIDO

Cuando apartamos nuestra mirada del Señor y comenzamos a intentar dirigir nuestras vidas con la «sabiduría del mundo», es muy habitual que acudamos a refugios que no nos pueden proteger. Esto fue lo que vivió David en el pasaje que hoy examinamos. El rey Saúl lo buscaba para matarlo y él dejó que un temor anidara en su corazón. David llevaba años huyendo de Saúl y pensó que más tarde o más temprano el rey acabaría matándolo. Así decidió exiliarse y se fue a vivir con los filisteos, los enemigos del pueblo de Dios. La experiencia que él y sus seiscientos hombres vivieron fue una de las más amargas de su vida. Nosotros también, caemos a menudo en este error que nos conduce a indecibles sufrimientos y angustias. ¿Habrá alguna manera de recuperar lo que hemos perdido? 1 Samuel 30:1-31.

EL COSTO DE SEGUIR A CRISTO

Tres son las respuestas que Jesús da en este pasaje a aquellos que quieren seguirle. Si las leemos fuera de su contexto nos pueden parecer muy radicales y hasta extremas, pero Jesús tiene una buena razón para responder así. Él no ponía las cosas fáciles a quienes mostraban interés en ser sus discípulos, más bien todo lo contrario. La pregunta fundamental que debemos plantearnos seriamente es la siguiente. ¿Por qué buscamos a Jesús? ¿Cuáles son las auténticas y reales motivaciones para desear ser un discípulo suyo? ¿Nos hemos detenido a considerar seriamente cuál es el costo de seguirle? Lucas 9:57-62.

EL SEÑOR PRESIDE EN LA TORMENTA

Este conocido pasaje en el cual los discípulos viven una experiencia traumática encierra varias verdades aplicables a nuestras circunstancias actuales. Todos, más tarde o más temprano, vamos a pasar por tormentas, tal vez no físicas, pero sí del alma. Todos experimentaremos momentos de dolor, pérdida, enfermedad, sufrimiento y problemas que viviremos como auténticas tempestades. El mismo Jesús nos lo advierte en varias ocasiones. Por eso debemos estar muy atentos a estas verdades que nos ayudarán a superar esos terribles momentos mientras el Señor nos conduce a través del valle de la prueba.
Mateo 14:22-33

LA ESPERANZA DE NUESTRA HERENCIA

29En medio de la adversidad, las pruebas y la enfermedad es fácil que bajemos la mirada de nuestro Señor a las circunstancias, a lo que nos rodea y así perdamos la perspectiva divina y desesperemos. Pedro escribe su primera carta a una iglesia que está siendo perseguida a causa de su fe. Han tenido que salir de su país, de su tierra (son expatriados) y están dispersos por diferentes lugares. Pueden ser extraños en este mundo, pueden ser rechazados, perseguidos y expatriados, pero hay un lugar al que pertenecen, y hay un mundo en el que encajan. Además hay una herencia que recibirán y en ella estará todo lo que Dios les ha prometido y provisto en Cristo. ¿Cuál es esa herencia? ¿Cuál fue el motivo por el cual Dios los salvó? ¿Por qué les dio esa herencia?
1 Pedro 1:3-5

TODAS LAS COSAS NOS AYUDAN PARA BIEN

El texto que hoy analizamos es muy conocido y muy utilizado en todo el mundo evangélico. Pero, ¿conocemos y vivimos todo lo que el mismo significa? En él se encuentra insertada una de las mayores promesas de la Palabra de Dios para su pueblo. Una que puede librarnos y revolucionar nuestra vida para los días que están en el porvenir. Hay una verdad muy clara en las Escrituras y es esta: nadie puede frustrar los planes del Señor: “Todo lo que Jehová quiere, lo hace, en los cielos y en la tierra, en los mares y en todos los abismos.” (Sal. 135:6). Dios está usando su poder y su sabiduría para que todo lo que sucede obre para el bien de su pueblo escogido.
Romanos 8:28.

LA JUSTIFICACIÓN Y SUS IMPLICACIONES

La doctrina de la justificación tiene un papel central en la historia de la Iglesia y hace que el Cristianismo bíblico sea una fe totalmente distinta a la de cualquier otra religión. Una comprensión correcta del Evangelio y de la eterna salvación que este nos ofrece, debe de abordar el significado y la importancia de esta doctrina. Porque una comprensión incorrecta de la justificación corrompe por completo el auténtico Evangelio, mina el cimiento de la vida cristiana, y hace imposible la seguridad de la salvación. Romanos 5:1-5.

JESÚS ESTÁ EN TU BARCA

Todos, más tarde o más temprano experimentamos tormentas en la vida. Son situaciones que no podemos controlar y que desafían nuestra fe, nos causan dudas y provocan dolor y sufrimiento. Durante esas circunstancias difíciles solemos ser presa del temor por lo que nos depara el futuro más o menos inmediato y además tendemos a dudar del poder o del amor o de la sabiduría de Dios para superarlas. De la experiencia que vivieron los discípulos con Jesús en este pasaje de Marcos aprendemos cuál es la solución que el Señor nos ofrece en estas situaciones tan duras. Marcos 4:35-41.